Luz Mary Caro, Roberto Castilla, Marcos Rhenals, Luis Guzmán (q.e.b.d.) y Jairo Polo Herrera (sentado)Cuando tener un televisor era un lujo, Jairo Polo Herrera, a través de la radio, suplía con su voz esa necesidad que había en muchos hogares cordobeses.
En esa época, décadas del 60, 70 y parte de los años 80, Jairo Polo era más conocido que muchos alcaldes de la época en Córdoba, porque a través de su programa radial Ecos Regionales se ganó el reconocimiento por su manera de informar y por su seriedad.
El pionero de la radio en Cereté, antes de ser periodista, fue mensajero de un banco, aunque su pasión por informar la tuvo desde niño cuando iba a las canchas y simulaba ser locutor tomando cualquier elemento que usaba de micrófono.
Según Ciro Solano Portacio, uno de sus grandes amigos, Jairo Polo fue el precursor de la radio porque fue el primero en hacer una transmisión de fiesta en corraleja y de otros eventos culturales en Cereté. En esos tiempos las condiciones tecnológicas eran muy limitadas.
Luz Mary Caro, quien lo acompañó los últimos 30 años, recuerda que él siempre decía que lo único que supo hacer en la vida fue escribir y usar su voz para informar.
Laboró por varios años como corresponsal en Córdoba para El Espectador, La República, Diario del Caribe y la cadena radial Todelar. También lo hizo en distintas emisoras de Cereté y Montería.
Jairo Polo siempre se mostró inquieto e interesado por mantener informado al departamento y de que se conocieran las noticias del Sinú, más allá de lo local y nacional. Por ello se lanzó a la aventura de fundar la Agencia de Noticias Tay, que despachaba informaciones sin ningún costo para medios de todo el país. En una ocasión el periódico El Nacional de Caracas publicó la noticia del Reinado Nacional de la Ganadería, que él les envió.
El pionero de la radio en Cereté tuvo 11 hijos con distintas mujeres. Luz Mary Caro, quien lo conoció cuando ella tenía 22 años y él más de 40, lo recuerda como un buen hombre y de muchos amigos.
Con Luz Mary tuvo a Lindajara, una administradora de empresas que admite que no le gusta para nada el periodismo. Sin embargo, dos de las hijas de Jairo Polo: Tay, a quien bautizó así en honor a su agencia de noticias y Alma, sí heredaron la vena periodística de su padre. La primera trabaja para una revista de deportes en Houston, Estados Unidos, y Alma lo hace para EL MERIDIANO de Sucre.
Otro de sus grandes amigos, el reconocido periodista y narrador deportivo, Edwin Tuirán Ruiz, lo recuerda como un hombre sagaz para olfatear las noticias y para vender la pauta y así sostener sus espacios en las emisoras en donde trabajó. Tuirán no duda en afirmar que Jairo Polo fue fundamental en su carrera. "Cuando solo tenía 15 años me dio la oportunidad de trabajar a su lado, me abrió el camino porque me enseñó a leer las noticias y a escribirlas, y con lo que ganaba trabajando con él, me pagaba el colegio", dijo Tuirán.
Jairo Polo falleció de 73 años a causa de una diabetes, y por eso encontraba el descanso obligado en su hogar en el barrio Santa Teresa en Cereté. Sin embargo, no le negaba sus conocimientos a propios y extraños. "No tuvo plata, pero no murió en la miseria, porque siempre nos unimos en torno a él para acompañarlo, por muchas de las cosas que nos ofreció en vida", dijo Luz Mary Caro.
FUENTE: Legado del pionero de la radio http://bit.ly/nk1nuy
Via Yimber Gaviria, Colombia
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